Rosa María Palacios

Un blog de política independiente

2 Agosto, 2016

Hora de mirar televisión

Sólo quiero recordar que dice la vigente Ley de Radio y Televisión. Un recordatorio no es una amenaza, ni una ofensa. Mi primer propósito es sólo difundir la ley. El segundo, que el nuevo Ministro la haga cumplir.

Se trata de una ley aprobada en el año 2004, durante el gobierno de Toledo, bastante liberal con los contenidos de radio y televisión. En esos días, salíamos de la orgía de corrupción orquestada por Montesinos y sus propietarios de canales de televisión comprados con ladrillos de billetes. Urgía una televisión con contenidos periodísticos que reflejaran el buen periodismo que queríamos tener. Peleamos contra todos los que querían controlar contenidos y ganamos. ¿Valió la pena? Por muchos años, sí. Pero hoy, lo dudo.

Libertad, hay, de eso no hay duda. La ley sólo incluyó algunas restricciones. Pequeñas, nada imposible de hacer. Aquí van para que las conozcan:

“Artículo 40.- Horario Familiar

La programación que se transmita en el horario familiar debe evitar los contenidos violentos, obscenos o de otra índole, que puedan afectar los valores inherentes a la familia, los niños y adolescentes. El horario es el comprendido entre las 6.00 y 22.00 horas.”

“Articulo 76.- Infracciones graves

h) El incumplimiento de las normas relativas al horario familiar y de protección al menor”

Artículo 77.- Infracciones muy graves

g) La Comisión en el lapso de un año de dos (2) o mas infracciones graves.”

Artículo 80.- Cancelación

La cancelación de la autorización puede ser dispuesta para los casos de comisión reiterada de infracciones calificadas como muy graves.”

Esta es la ley. No se sorprendan. Si no la conocían, pues ahora ya la conocen. Esta es la herramienta para tener un mínimo de decencia en la pantalla. Esta es la norma que el Congreso puso en las manos del Ministerio de Transportes y Comunicaciones para que se haga cumplir. Esta es la forma en que creíamos podíamos separar espectáculo morboso de noticia. Un freno que los propietarios han desconocido cada vez en mayor escala porque ningún Ministro ha estado a la altura de sus obligaciones legales.

¿Respeta la televisión peruana la ley cuando todos los niños del Perú desayunan a diario viendo ejecuciones de inocentes en vídeos de cámaras de seguridad? ¿Un sicario disparando y un comensal defendiéndose a tiros no es contenido violento? ¿Pasarlo decenas de veces? ¿Es entretenimiento en horario familiar darle dinero a una persona cada vez que afirma haberse acostado con éste o aquel o haber hecho un trío?

La noticia se ha pervertido tanto en la televisión que sólo vemos morbo. Los vídeos de las cámaras de seguridad no sirven para otra cosa que no sea proveer de material a los medios que hacen un festival de ejecuciones, asaltos, atropellos y otras formas de desgracia humana sin limite alguno. ¿Vende? Claro que vende. El ser humano es morboso por naturaleza. La miseria humana jala el ojo y de eso se trata. Si un canal lo hace y funciona, todos lo copian. Todos reciben las mismas mediciones de audiencia (rating) y saben lo que excita al espectador y lo que lo hace cambiar de canal. A mostrar cadáveres pues. ¡Llego la hora!

Total, ¿importa la ley? ¿Alguien ha sido sancionado por hacer exactamente lo que esta prohibido? ¿Importan los derechos de los niños? ¿Importa que tengamos un mínimo de contenidos periodísticos de relevancia nacional? ¿Importa que nos miremos el ombligo en lugar de ver el planeta? No, no importa.  Audiencia grande, anunciante grande,  plata en grande. Mucha, pero mucha plata. Por lo que se ve en la pantalla, eso es lo único que importa a los accionistas. No digan que no.

Pero, ¿que pasaría si el Ministro de Transportes y Comunicaciones decide fiscalizar el cumplimiento de la ley? ¿Que pasaría si a un canal, o a todos, les aplican las multas y luego de la reiterancia le cancelan la autorización? ¿Y si luego sacan las autorizaciones a concurso o remate? ¿No creen que les interesaría súbitamente hacer buen periodismo y sacar las toneladas de mierda con las que alimentan al pueblo cada día?

La ley es la ley. ¿Recuerdan? Y por si acaso, hay antecedentes de mandar a negro a un canal por violar esta misma ley.

Ahora pues, los quiero ver. Porque un cambio se viene.  Un cambio es imprescindible. No es posible que el único noticiero matutino que los niños puedan ver sea el del canal del Estado. A ese extremo de locura hemos llegado en ese manicomio de morbo y dinero que es hoy la televisión peruana.

O sanan solos muy rápido o mueren pronto. Advertidos están.

Share on FacebookShare on Google+Tweet about this on Twitter

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *