A los pavos no les gusta la Navidad
El auto emitido por unanimidad por el Tribunal Constitucional, que concede la medida cautelar al Congreso para que Pedro Castillo no interprete, en rebeldía con la ley 31355, que se ha negado una cuestión de confianza, ha caído como un balde de agua fría tanto en el Ejecutivo como en el Legislativo. Si el del Acta del Consejo de ministros del 24 de noviembre (hecha pública por Betssy Chávez el domingo pasado) fue concebida como un mero mecanismo de presión sobre el congreso, para que cesen las investigaciones por diversos delitos a Castillo, pues la jugada salió pésima, por excesiva.
El TC señala que “… el Poder Ejecutivo podría, a partir de su interpretación, plantear una cuestión de confianza y considerarla, en caso de ser rechazada, como una segunda denegatoria de confianza. Este Tribunal Constitucional entiende que, si se espera hasta la resolución del fondo de la presente controversia … el Poder Ejecutivo podría haber disuelto el Congreso de la República con base a dicho acto”. (Fundamento 29 y 30, glosado). Es decir, el TC considera que el Ejecutivo va a disolver el Congreso de manera inminente. Tan urgente es, que concede una medida cautelar para que ello no suceda.
En el Legislativo podrían estar aliviados respecto a la ahora imposible disolución. Pero hay dudas y hasta pánico. Si ese es el plan oculto, el gobierno cuenta con una debilidad parlamentaria: su inmensa impopularidad. No hay presidente del Perú que haya cerrado el Congreso que no haya gozado de una inmediata y elevadísima popularidad- Para el TC no hay duda alguna que esa es la intención del Ejecutivo. ¿Qué hacer entonces? ¿Seguir confiando en Pedro Castillo?
Mientras tanto, en el Ejecutivo, ahora los ministros se desgañitan diciendo que no hay otra cuestión de confianza “en agenda”, pero olvidan que hace apenas unos días, Aníbal Torres anunció una por oficio y planteó otro en el pleno. Dos al hilo, sugiriendo que podía presentar varias en simultaneo. El pedido de una tregua en el Informe Preliminar del GAN de la OEA es un pedido de Castillo y de nadie más. ¿Qué tregua de a uno existe? Aunque sus ministros se multipliquen, su credibilidad ésta a la baja en el Congreso.
La moción de vacancia por incapacidad moral lo único que necesita es 87 votos. No necesita pruebas ni argumentos. Personalmente me opongo a esa interpretación y a ese uso, pero el lamentable precedente quedó establecido con Vizcarra. A Castillo sólo le queda interponer una demanda competencial para que este TC haga lo que el anterior no quiso hacer. Mientras tanto, la gran mayoría de observadores creen que no existen los 87 votos porque solo 73 votaron por su admisión. Tal vez ahí no está el dato interesante sino en el número de votos en contra, donde está el núcleo duro de apoyo a Castillo. En la primera moción de vacancia votaron en contra 76, en la segunda 46 y en esta 32. Eso quiere decir que hay aún un potencial de votos para convocar.
Sumas y restas, los votos para vacar a Castillo sólo podrían salir de Perú Libre. Si el presidente disuelve el congreso, es el partido que más pierde. Pierde un gran y nunca obtenido financiamiento público y pierde una posición de poder que no va a recuperar en la próxima elección. En el 2020 no pasaron la valla y en las últimas elecciones regionales y locales les fue pésimo. No han podido ni juntar firmas para su punto único de agenda: una asamblea constituyente que pocos piden. Si Castillo los traiciona y disuelve el congreso, no quedará nada de Perú Libre. ¿Van a esperar esa traición o van a atacar primero? El acta del 24 de noviembre y la Resolución del TC puede ser el parteaguas que hace tiempo están buscando.
Si este lunes se protege a Dina Boluarte en la Sub-Comisión de Acusaciones Constitucionales, es probable que esa sea la señal esperada para el miércoles. Cerrón se tragará el sapo y apretará el botón de eyectar. Si se le condena, todo sigue igual. La “devolución” de la moción por parte de Castillo es un pésimo ardid, mal asesorado, que denota debilidad. Aquí no hay un juicio. La moción se vota el 7 de diciembre, con él o sin él.
Si encuestas a los pavos, ninguno votaría por la Navidad como su fiesta favorita. Los congresistas, en general, y Vladimir Cerrón y los suyos, en particular, van a tener que aquilatar si hay una clara y urgente amenaza a su mandato. Y si la hay, como lo cree el TC, deben decidir si van a ser tan pavos de terminar de cena navideña de Pedro Castillo.
Columna publicada el domingo 4 de diciembre del año 2022 en el diario La República
El país sudamericano, que sufrió una hiperinflación de más de 7000% en 1990, decidió no atar su moneda a un valor fijo y, sin embargo, pudo bajarla; la mantiene en un dígito anual, incluso pese a sus recurrentes crisis políticas, como la de la última semana.
1. ″Desdolarización”
La inflación cada vez más elevada lleva a pensar soluciones radicales. Así, suena cada vez más fuerte la idea de la dolarización como principal medida. En paralelo, el presidente del Banco Central de Perú dio una entrevista en la cual dejó conceptos interesantes y que, además, sirven para ilustrar una economía que tuvo raíces inflacionarias similares a las de la Argentina y que pudo controlar a lo largo del tiempo, incluso pese a las crisis políticas, como la de esta semana. En vez de dolarizarse, eligió el camino de la “desdolarización”. Repasemos su historia.
2. Inflación
La caída de la inflación a nivel global empieza en los 80, cuando se consolidan las economías más desarrolladas. Europa y Estados Unidos pasan de una inflación de dos dígitos a un objetivo de 2% anual, que, excepto por el último año, cumplen desde entonces. A América Latina este proceso llegó años más tarde y los países de la región pasan de inflaciones cercanas al 100%, a comienzos de los 90, a controlarla en torno a un dígito anual. Si bien el objetivo era el mismo, los mecanismos para alcanzarlos fueron diferentes. La Argentina optó por un régimen de tipo de cambio fijo (convertibilidad) para desacelerar el proceso de una hiperinflación. Perú, que sufrió una hiperinflación de más de 7000% en 1990, decidió no atar su moneda a un valor fijo y, sin embargo, pudo bajarla.
3. Fujishock
La principal razón era un déficit fiscal elevado y sostenido en el tiempo (cerca de 12%) financiado con transferencias monetarias del Banco Central. A esta acumulación de desequilibrios se sumó un contexto externo desfavorable, con una prominente baja en los precios de las commodities. Esto llevó a que los recursos del país cayeran y en agosto de 1990 se anunció un plan de estabilización, conocido como “Fujishock”. Este plan constó de la liberalización de precios hasta ese momento controlados por el Estado, congelamiento de la planta pública, reducción de gastos vía eliminación de exenciones impositivas y suba de impuestos sobre las exportaciones. A eso se le sumó un 400% de aumento en el salario mínimo y se otorgaron bonos excepcionales.
4. Cambios
Luego de los cimbronazos, la economía peruana había quedado muy dolarizada. Es decir, tanto los créditos otorgados por entidades financieras como los depósitos de los ciudadanos se denominaban en dólares. Al igual que la Argentina con el austral, en 1985, en Perú hubo un intento de recuperar la confianza de la moneda y se reemplazó el sol de oro por el inti, al tiempo que se dispuso un esquema de desdolarización forzosa, mediante la inconvertibilidad de los depósitos en efectivo en dólares. Duró seis años y fue reemplazado por “el nuevo sol”. Desde entonces, el sol y el dólar conviven y se permite que las transacciones y el ahorro se mantengan en la moneda que sus habitantes decidan. Sin embargo, la preferencia por los soles comenzó a ser marcada.
5. Resultados
Dentro de historias diferentes hay similitudes. El componente principal del proceso de desdolarización tuvo que ver con el compromiso de reducir la inflación, con metas de cercanas a las de EE.UU. y controlando la cantidad de dinero en la economía, con una tasa de interés atractiva para los ahorristas. Además, se realizaron acciones de coordinación orientadas a extender el uso de créditos en soles y a la valuación de los precios en esa moneda. Hoy, Perú convive con inflación baja, sin cepos y una economía que confía en su moneda.
Santiago Bulat
PARA LA NACION
Ya ven, no todos los peruanos somo corruptos, brutos, achorados, ignorantes, incomeptentes y/o traidores de la patria.
Hay muchos que somos inteligentes y brindamos aportes al pais sin necesidad de coimas, repartijas, peculados, malversaciones, ni evasiones tributarias. Lo hacemos por el bien comun, por amor a la patria porque esa es nuestra chamba y para eso nos pagan.
¿¡¿A que ratas de la ONPE y el JNE te refieres?!?
¿A esas que se rehusaron a respaldar el invento del fraude electoral ese?
¿Ven como es la Mafia de la DBA de corrupta e incompetente?
Comprendamoslo, la hierba mala muere, ni nunca va a cambiar, sobre todo si son rateros profesionales y eso es todo lo que saben hacer; ese es su modus viviendi y modus operandi. Por eso debemos purgarlos no solo del Chongreso o el Congrezoo, sino del mapa politico del Peru para siempre.
¿Se imaginan a Luz Salgado, Rosa Bartra, Martha Moyano, Miki Torres, Karina Beteta, Lourdes Flores, Alberto Beingolea, Antero Flores, Manuel Merino, Alfredo Barnechea, Jorge del Castillo, Mauricio Mulder, Javier Velasquez Quesquen, Mercedes Cabanillas, Hernan Garrido-Lecca, Omar Quesada, Carlos Mesia, Cecilia Chacon, Rolando Souza, Pancho Tudela, Martha Chavez, Alejandro Aguinaga, Jose Mesias, Luis Galarreta, Luis Giampietri, Pedro Spadaro, Jorge Montoya, Jose Cueto, Juan Jose Muñico, Vladimir Cerron, Anibal Torres, Susana Villaran, los hermanos Humala, Veronika Mendoza, Gregorio Santos, Marco Arana y gente asi, casi todos de ese bajisimo calibre, inmorales de nacimiento y por genetica o simplemente incompetentes comprobados, en NUESTRO Senado?
¿Y esa es su mejor propuesta que se les ocurrio para solucionar los problemas del Peru, muchisimos de los cuales ustedes mismos han causado?
Mhmmmmmmmmmmm…
Ya.
Comprendemos perfectamente.
¡Que casualidad! La mayoria de los politicos arriba mencionados tienen un CODINOME con la empresa Odebrecht y, por lo tanto, estan involucrados (= metidos de cabeza) directamente con los actos de corrupcion atribuidos al peor y mayor mega-escandalo de corrupcion politico-empresarial en toda la historia del Peru: ♥♥♥LAVA JATO♥♥♥.
¡Que linda familia, ah! ¡LINDA! Como son las cosas, ¿no? El fruto nunca cae lejos del pie del arbol de donde proviene…
Cuando la nueva presidenta peruana, primera mandataria mujer en toda la historia del Perú, Dina Boluarte, asumió el poder y se convirtió en la sexta mandataria del país en los últimos cuatro años, casi todos los diarios del mundo señalaron que el Perú es uno de los países más inestables de América Latina, y que vive en un estado de caos absoluto.
Sin embargo, no es así. Por extraño que parezca, el Perú es uno de los países más estables de América Latina. El país tiene un Banco Central totalmente independiente, que ha sido dirigido por el mismo economista sensato durante los últimos 16 años, y una economía relativamente sólida. El Perú tiene una de las tasas de inflación más bajas de América Latina y las mayores reservas de divisas de la región en relación con su economía. Los presidentes peruanos van y vienen, pero la economía ha venido creciendo en las últimas tres décadas. Julio Velarde, el presidente del Banco Central de Reserva del Perú (BCR), ejerce su cargo sin mucho drama. Está en este desde el 2006 y anteriormente había sido miembro del directorio del BCR en la década de 1990 y principios de la década del 2000. Velarde ha sobrevivido a presidentes de derecha e izquierda. El año pasado fue designado para un nuevo mandato de cinco años por el ahora expresidente Pedro Castillo, quien asumió el cargo en el 2021 postulando con un partido marxista.
Castillo fue dejado cesante por el Congreso el 7 de diciembre después de que intentó dar un golpe de Estado al anunciar la disolución del Parlamento poco antes de que los legisladores votaran sobre su posible destitución por cargos de corrupción. Boluarte fue la compañera de fórmula de Castillo y quebró con el partido marxista Perú Libre en enero. A pesar del caos político del Perú, la economía peruana crecerá un 3% este año. Se proyecta que crecerá un 2,9% el próximo año, lo que sería más que el crecimiento promedio de la región. La inflación anual del Perú será del 8,2% este año, en comparación con casi el 100% en Argentina y el 160% en Venezuela. La inflación del Perú se ha mantenido en un solo dígito desde 1997. Las reservas de divisas del Perú están en US$74 mil millones, las más altas de Sudamérica en relación con el tamaño de su economía.
Cuando se le preguntó a Velarde al día siguiente de la asunción de Boluarte si cada vez que hay un cambio de presidente no teme que lo despidan, Velarde respondió, con la mayor naturalidad, que en realidad: «¡No! La verdad es que no ha habido conflictos importantes con el Poder Ejecutivo, ni amenazas a la autonomía del Banco Central. La autonomía del Banco Central está bien garantizada en el Perú”. Irónicamente, el BCR del Perú ha estado más a salvo de los ataques presidenciales que la Reserva Federal de EE.UU., cuyo expresidente, Jerome Powell, era criticado constantemente en el 2018 por el entonces presidente Donald Trump. En cuanto a los secretos de la relativa estabilidad económica del Perú, además de la independencia del BCR, Velarde citó el tipo de cambio flotante del país. A diferencia de otros países latinoamericanos, en el Perú cualquier persona puede cambiar legalmente la moneda local por dólares estadounidenses y depositar sus ahorros en moneda extranjera en un banco peruano. Esto “atenúa la presión sobre la salida de capitales en momentos de tensión”, me explicó Velarde. Obviamente, al Perú le iría mucho mejor si tuviera un sistema político menos caótico y corrupto, donde más de una docena de partidos no estuvieran constantemente en guerra y conspirando contra el presidente de turno. Los candidatos presidenciales peruanos suelen ganar la primera vuelta con menos del 20% del voto, y no pueden formar coaliciones políticas una vez que llegan al poder. Aun así, es sorprendente cuánto ha crecido el Perú en las últimas décadas a pesar de su caos político.
Así que la próxima vez que escuchen que el Perú es un país ingobernable, tómenlo con pinzas. La política del Perú es un desastre total, completo y tradicionalmente histórico, pero el país tiene más estabilidad económica que muchos de sus vecinos. Su secreto es tener un Banco Central ferozmente independiente.
¿Y, entonces, para que quieren mantener a una presidenta incompetente hasta el 2024? No tiene ningun sentido. Lo que proponen, para variar, no tiene ni pies, ni cabeza. ¿Por que no adelantar las elecciones para el 2023? Una presidenta incompetente y un Congrezoo corrupto, incapaz e impopular son una combinacion letal para el pais, ¿o no? ¿Tanto se van a demorar en hacer las reformas que la poblacion les exige que hagan? ¿O ahora nos van hacer esperar para despues no hacer ni mierda? O sea, mas del mismo hueveo de siempre.
La gente ESTA HARTA DE USTEDES. SUS MALDITOS TROLLS Y SUS JUEGUITOS ESTUPIDOS.
Esperemos que Dina Boluarte este a la altura de la situacion y satisfaga principalmente las necesidades del pueblo peruano y no solo del empresariado, la clase politica y la elite. Sobre todo si las prioridades de cada grupo van en contra de los intereses de la nacion y/o son corruptas o dañinas de cualquier otro modo. Hay que dejar la ideologia y el partdarismo de lado para favorecer la practicidad enfocada en solucionar los multiples y graves problemas que aquejan al pais. Y ahi entra el Congreso en dejar de ser mercantilista y blindar la corrupcion de los partdos politicos, maxime los propios que permanecen a un nivel flagrante, activo y peligrosisimo. No sin decir que los legisladores deben dajar gobernar a la Presidencia sin obstruir innecesariamente. A la vez, deben dar el buen ejemplo de sumo respeto a la justicia, la democracia, la institucionalidad y la Constitucion, mientras plantean soluciones a los problemas del pais en vez de cerrar filas contra el progreso y la evolucion de este mismo. Si se creen superiores, demuestrenlo con su conducta, decisiones y propuestas, no lo contrario.
Por ultimo, no nos olvidemos que los poderes del estado se deben a la ciudadania. No a sus deseos personalisimos, ni a los de intenciones subrepticias.
¿¡¿Que ratas de la ONPE y el JNE?!?
¿Esas que se reusaron a respaldar el invento del fraude electoral ese?
¿Ven como son estas ratas corruptas e incompetentes? La hierba mala nunca va a cambiar, sobre todo si son rateros. Por eso debemos purgarlos no solo del Chongreso o el Congrezoo, sino del mapa politico para siempre. ¿Se imaginan a Luz Salgado, Lourdes Flores, Jorge del Castillo, Mauricio Mulder, Javier Velasquez Quesquen, Carlos Mesia, Cecilia Chacon, Rolando Souza, Pancho Tudela, Martha Chavez, Alejandro Aguinaga, Jose Mesias, Luis Galarreta, Jorge Montoya, Jose Cueto y gentuza de ese bajisimo calibre en nuestro Senado?
Nadie te va a dar una visa, troll. Ni siquiera Haiti. Nadie te quiere en su pais. A los conspiradores, traidores de la patria, corruptos, blindadores de pedofilos, besaculos, chupamedias, trolls e ignorantes consumados nadie los quiere. La solucion es que agarres un revolver potente y te vueles los sesos, como hizo el otro de tus patrones. Ya tu sabes quien…
No me extrañaria nada que se unan. Es decir, se conviertan en complices y socios criminales y se queden hasta el 2026. Porque, ¿alguien duda que la agravada y demasiado tradicional corrupcion del AproFujiMontesinismo y sus aliados politicos se ha acabado? No, pues. No es que se hayan confesado con los curas pedarastas del Opus Dei y Sodalicio y hayan sido absueltos de sus pecados para siempre, ¿no? Asi no funca la cosa. Para comenzar, hay pecados que por mas que la iglesia los perdone, estos no dejan de ser delitos que deben ser juzgados y condenados con toda la severidad y el peso de la ley. Digo, ¿no?, porque eso de autodeclararse inocente…no quiere decir que se sea inocente, ¿no? ¡Imaginense si todo asesino o mafioso tuviera la potestad de autoabsolverse de sus crimenes asi nomas, como si nada! No, pues. Asi no es la vida, esta demas decir.
Si la presidenta Dina Boluarte, como ha dejado entrever, finalmente decide proceder a un adelanto de elecciones, ya no le corresponde a ella hacerlo, sino al Congreso, ya que se requiere de una reforma constitucional que recorte el mandato tanto presidencial como parlamentario. Y, como se sabe, la mayoría de congresistas –sobre todo los de la Mafia DBA- no quiere eso, pese a lo que declaren frente a cámaras, lo cual demuestra que siguen siendo unos farsantes profesionales. Tendría que haber una protesta callejera masiva y no las algaradas aisladas que se han visto en estas horas, para que la mayoría de congresistas dé el paso definitivo para aceptar salir del poder antes del tiempo programado. No lo quieren los corruptos e incapaces, que medran de los lobbies y de ingresos superlativos fuera de la caja oficial de la tesorería parlamentaria (y algunos lo hacían de las arcas del gobierno castillista), pero tampoco lo quieren los honestos, por una cuestión –dicen-, de dignidad política, ya que mal creen que su carrera política se vería truncada para siempre si semejante adelanto ocurriese y ellos, como está establecido en la Constitución, no pueden postular ni en dicha elección adelantada ni en la siguiente; o sea, en otras palabras, les importa más su billetera que otra cosa a que mucos ni estudios universitarios poseen. Así que qué carrera profesional ni qué ocho cuartos.
Lo sensato es proceder a una transición regulada y pausada, con reformas políticas y electorales previas (por lo menos las concernientes al nuevo proceso), que permita, además, que el país se reconstruya de la aplanadora destructiva del paso de Pedro Castillo por el gobierno, se reestablezcan líneas de mando tecnocráticas, se reinstale la meritocracia, se reactiven programas públicos, como la salud y la educación, que estaban a su suerte, y de esa manera arribemos al proceso electoral eventualmente en ciernes, con un mejor Estado, una mejor economía, un mejor ambiente político, un mejor país, en suma.
Procesar un adelanto acelerado, precipitado y, además, inconstitucional, como quieren las huestes radicales del castillismo dolido y, por supuesto, el antaurismo, tiene claramente un objetivo: que nuevamente la izquierda radical antiestablishmentse haga del poder dada la fragmentación precaria de la centroderecha y la aún superviviente irritación ciudadana por el calamitoso estado social en que deja el país el Atila chotano.
Dina Boluarte, sea que busque completar el mandato hasta el 2026 o sea que, leyendo el pulso ciudadano, proceda a un adelanto de elecciones consensuado con el Congreso, debe hacerlo con inteligencia y mesura, sin apresuramientos ni improvisaciones dándole prioridad a la voluntad popular en vez de los intereses personales, empresariales yy mercantilistas que siempre contaminan las decisiones de los políticos peruanos. Hay mucho en juego todavía en el país, como para que sigamos reeditando la inefable desprolijidad del antecesor presidencial y los seis otros corruptos que no presidieron antes que él, hoy felizmente fuera del poder y afrontando los juicios penales que le corresponden, como gran lección democrática para el país.
No, Dina Boluarte no tiene un solo caso judicial en su contra, en comparacion con tu jefa y el lider historico de tu partido, a quienes adoras siendo peores que inclusive Pedro Castillo. Otra cosa, la inestabilidad politica se debe en gran parte a las inmensas cagadas que el AproFujiMontesinismo y sus aliados RN, UPP, AP y Avanza Pais han cometido y siguen cometiendo.
Mira solo la basura que escribes, nomas. Mas mentiras destructivas y nada de autocritica, ni propuestas firmes y realistas para solucionar las necesidades del pais. Pedro Castillo cayo por corrupto, mentiroso, bruto y achorado, o sea lo mismo que es la DBA. Ahora ya quieren meter el Adelanto de Elecciones debajo de la alfombre para entornillarse en sus cargos. Pero eso no es lo que quiere el pais.
Mira a este comprobado golpista, corrupto, usurpador, sedicioso y despota autocrata de Alejandro Aguinaga comtradiciendo su persistente conducta con sus propias falsedades: https://www.youtube.com/watch?v=O0SCUqCXfP0
Siguen con la mentira en la punta de la lengua.
Claro, son unos hipocritas. Castillo merece lo que se le viene. Pero no es el unico que debe ser condenado. Aguinaga, por ejemplo, tiene una cola inmensa y muy peluda que debe pasar por las manos de la justicia. ¿Cuantas veces no ha mentido publicamente acerca de la salud de Alberto Fujimori para conseguir ilegalmente su indulto, por ejemplo?