Rosa María Palacios

Un blog de política independiente

23 abril, 2015

Sangre regalada no es sangre derramada

Mi tipo de sangre es O positivo, el decir el mas común de todos. Sangre ordinaria, común y corriente, que como dice el vals «también tiñe de rojo» y, como dicen los médicos, es del tipo universal.

Hace muchos años que intentó ser donante voluntaria de sangre. Siempre me han rechazado. Con 9 cirugías entre los 20 y 40 años siempre era el momento indebido: o estaba anémica o muy baja de peso para donar o estaba dando de lactar o había tenido una cirugía hacía pocos meses.

El 90% de la sangre que se usa en hospitales del Perú, sobretodo públicos, es comprada. La cifra me la dio un Ministro de Salud hace unos años. Me escandalizó la falta de solidaridad. La personas que necesitan sangre – y no tienen familiares porque, por ejemplo, vienen de provincia – buscan vendedores que rodean los hospitales. Esto se presta a prácticas que pueden no sólo poner en peligro la calidad de la sangre sino desvirtuar todas las normas peruanas sobre donación voluntaria de órganos y tejidos,

El problema de la sangre es que no dura mucho. Dependiendo del tipo de uso puede estar almacenada hasta 4 meses. Por eso, mas que la donación masiva en un solo día  lo que se necesita es un flujo constante de donantes voluntarios.

Existe además, toda clase de mitos sobre la donación de sangre. Me ha pasado pedir para amigos tipos raros  como O Negativo y recibir respuestas como «¿para quien es? Si es para ti, bueno, pero para un desconocido, no». Siempre es para un desconocido. Los bancos de sangre colocan la sangre cuando se necesita y la familia del paciente, repone.

También, hace muchos años, conseguimos 20 donantes para una jovencita extranjera sin familia en el Perú. Hay solidaridad si es que se activan las llamadas. Lo he visto muchas veces en twitter.

Donar sangre no engorda, no adelgaza, no quita fortaleza, no es lo mismo que tener una hemorragia. Tampoco duele, ni te incapacita para el estudio o el trabajo. Si se hace en un ambiente abierto como la PUCP y se te mantiene echada al donar, ni siquiera sientes vértigo. Hay personas, como yo, con síndrome vaso vagal, que los ambientes estrechos, los olores fuertes o ver las bolsas de sangre le producen un breve desmayo. La única precaución es permanecer echado unos 20 minutos. Y luego hidratarte y descansar un poco. Nada mas.

Cuando donas sangre te sometes a un protocolo muy complejo. Primero te pesan (lo mejor es pesar encima de 56 kilos, pero en mujeres pequeñitas pueden aceptar encima de 52 kilos). Luego hay que llenar un formulario, pasar por un tamizaje para determinar correctamente el tipo de sangre y los hematocritos, pasar por una entrevista con el médico sobre vida sexual, enfermedades, medicación tomada, cirugías recientes, en fin, detalles importantes.  Al realizarse la donación se toman dos muestras que van a laboratorio para verificar que la sangre donada no porte ninguna enfermedad para el receptor: hepatitis y VIH son los mas buscados.

¿Porque es importante donar? Porque nadie esta libre de sufrir un accidente, llegar en medio de una hemorragia a un hospital y necesitar sangre de emergencia. La primera sangre que le van a poner es la de los voluntarios. Debemos tener una cultura de donación que no tenemos,

La próxima vez que vea una carpa de donación de sangre, acérquese. No toma mas de media hora. ¿La satisfacción de hacer algo gratuito por un desconocido? No se la quita nadie.

Ayer doné sangre por primera vez. Pensé que me iban a rechazar por tener 51 años. Pero esta vez lo logré. De pura casualidad, pero lo logre. Gracias a mi hija que dono, yo también pude hacerlo.

 

Foto: Lucía Varillas Palacios

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